Con una convocatoria de asistentes que superó la meta planteada, inició el viernes 26 de julio próximo pasado, el “Curso Supervisión de procesos de soldadura” en el ITEC EL MOLINO. 

Temas tan complejos como la relación con inspectores de clientes, el tratamiento de desviaciones de calidad, el incumplimiento de programas de fabricación, los requerimientos de códigos y el control de procesos, entre otros, requieren sólido conocimiento y firme actitud para su control. Es por ello que, basándose en necesidades regionales de mercado, se puso en marcha este curso teórico-práctico, que tiene como premisa formar líderes de mando medio o gerencial para una eficiente supervisión y control de procesos y de recursos humanos de soldadura.

Tiene una duración de 6 meses y 80 hrs de formación. Las clases están a cargo de profesionales con actividades vinculadas a las temáticas a desarrollar, incluyendo Inspectores de Agencias Nacionales e Internacionales y Gerentes de Soldadura, de Calidad, de Fabricación y de Recursos Humanos. Todos coordinados por el Ing. Roberto Pieklo, responsable del Dpto de Soldadura del ITEC, con amplia trayectoria laboral en áreas de soldadura desarrollada en empresas nacionales y multinacionales de primer nivel.
En el inicio del curso, al igual que en las reuniones de presentación previas del curso, el Ing. Roberto Pieklo, recibió a los asistentes rescatando el rol del supervisor de soldadura, manifestando también que se trata de un curso particularmente especial, ya que la mayoría de la oferta de formación en esta temática se orienta a la formación de inspectores en soldadura. Si bien pueden parecer funciones similares y compatibles, existe una enorme diferencia en lo que respecta a responsabilidades y ámbito de gestión: el supervisor de soldadura es quien tiene que lidiar en el día a día tanto con los procesos como con las personas, donde son menester no solo el conocimiento sino también el liderazgo.
A partir de allí es que el programa de actividades iniciado incluye clases teóricas asociadas con prácticas, con la inclusión de mesas de trabajo integradas por los asistentes para el análisis y resolución de casos concretos, que permiten obtener una visión clara y objetiva de la problemática de la soldadura y del manejo de sus soluciones. También, actividades externas complementarias con un contacto directo con el ámbito en el cual desempeñarán sus tareas.
Por último, es importante destacar el carácter regional de la actividad, ya que asisten participantes de ciudades como Rafaela, Santa Fe, Gálvez y Esperanza, y nuevamente resaltar lo estratégico del proyecto debido a que continúa posicionando a Esperanza como un referente en temas de soldadura.